La banda, que fue soporte en la visita 2012 de Megadeth, realizó diversos conciertos por todo el territorio argentino, participando en el Maquinaria Fest junto a Slayer, Mastodon, Cavalera Conspiracy y Marilyn Manson, entre otras bandas.
Surgida de las cenizas de Hermética -otro emblema del heavy argentino-, Malón se convirtio en la banda más importante del heavy hasta su separación en 1998 y a lo largo de su trayectoria dejaron registrados tres discos como "Espíritu combativo" (1995), "Justicia o resistencia" (1996) y "Resistencia Viva" (1997), que fue grabado en vivo en el Microestadio de Ferrocarril Oeste.
Tres de ellos, Carlos Kuadrado (bajo), Antonio "Tano" Romano (guitarra) y el "Pato" Strunz (batería), recibieron a Télam en su bunker de la zona de Flores.
¿Que contiene el DVD “360”?
Romano:"360” fue un show que estuvo buenísimo y que está todo filmado, documentado para la historia del heavy metal argentino.
Strunz: Único. La presentación oficial será el 15 y el 22 de diciembre en Vorterix. Antes de eso vamos a tener una avant premiére gratuita en el mismo lugar para que todos puedan ir a verlo en HD y con sonido de show. “ 360” quedó increíble.
¿Cómo se sumó al proyecto Javi Casas como productor artístico?
Strunz: Javier tiene un concepto moderno y energía. Lo conocía desde hace tiempo, sabía lo que estaba haciendo. Es muy bueno, tiene una cabeza muy creativa. Decidimos sumarlo porque genera y piensa cosas. No hay explicarle nada, cuando le pedís algo, en dos segundos está hecho lo que uno imagina. Tiene mucha onda.
Básicamente es uno el que genera para dónde tiene que sonar pero él tiene todas las herramientas y la visión para hacerlo mucho más rápido. Tiene una oreja muy particular y del estilo. Hay ingenieros que son muy buenos, pero le decís ´Me gusta el tambor de Killswitch Engage´ y te mira cómo diciendo ´qué carajo es eso´. Con Javier no te pasa.
Kuadrado: Las composiciones son cien por ciento maloneras, pero con las nuevas tecnologías todas las bandas suenan bien y Malón no se puede quedar atrás, sin dejar de seguir siendo Malón.
¿Qué rescatan de la filmación en vivo?
Kuadrado: "No nos pusimos a pensar tanto, pero al segundo o tercer tema me di cuenta de que era una locura. Y por ahí me daba vuelta y lo veía al Tano y nos cruzábamos. Era una cosa de girar todo el tiempo. Pero no nos pusimos a decir ´cuando yo voy para allá, vos venís para acá´.
Romano:-No estaba preparado, salió natural.
Strunz: Tecnológicamente estaba todo producido, pero se olvidaron de producirnos a nosotros" (risas).
¿A quién se le ocurrió la idea del escenario “360”?
Strunz: Faltaba una semana para la vuelta oficial de Malón en el Malvinas y llegamos al lugar y nos encontramos que al otro día había una pelea de Vale Todo, con escenario redondo armado en el medio. Y automáticamente nos imaginamos tocando rodeados de gente saltando y cantando. Y pensamos que el próximo show tenía que ser así, sin pensar en el desbole de montar el sonido para que se escuche en todos los lugares, en las luces que no se pueden colgar del techo y tenés que buscar una estructura..."
Strunz: Seguramente si nos hubiéramos puesto a hacer cuentas de lo que salía producir eso, no lo hubiésemos hecho (risas) Lo que pasa es que somos de corazón y para adelante".
¿Comparando la escena metalera cuando empezaron con la de ahora, cómo la ven?
Romano: Antes era todo a pulmón, ni pensábamos en una pantalla atrás como en el último show en Malvinas. Ahora hay muchas más gente porque el heavy sigue creciendo, pero la pasión es la misma. Está bueno ver tantos pibes jóvenes que sienten igual que nosotros que apostamos a esto cuando no existía esta música y éramos unos pocos.
¿A dos años del regreso de Malón, cómo vivieron la bienvenida, con qué expectativa?
Kuadrado: A cualquiera de los cuatro le pasaba lo mismo: nos encontraban en un show y nos preguntaban ´¿Y Malón cuándo vuelve? Queremos ver a Malón´. Pero nos sorprendimos porque a los diez días la mitad de las entradas estaban vendidas y faltaban tres meses. Y dijimos, ´Epa, ¿qué pasó?´ (risas) Por eso explotó el lugar, nunca se había visto así con una banda nacional.
Romano: ¡8000 metaleros! Hay bandas que convocan porque los siguen o porque tuviste una buena publicidad, y entonces va gente que te va a ver sólo esa vez. Pero acá estaban los que aman nuestra música y se saben los temas. Ni siquiera teníamos afiches.
Strunz: La verdad es que la gente siempre nos hizo sentir así. Sabíamos que íbamos a ser superrecontrabien recibidos, pero nos sorprendió que en el exterior, donde habíamos hecho pocos recitales, al volver ahora y que te conozcan en toda Latinoamérica. Nos hicieron sentir muy especiales, en Centroamérica, en Nueva York, donde nunca pensamos llegar con nuestra música".
Son conciertos muy emotivos porque va gente que está viviendo en otro país y llega algo que fue parte de tu juventud… Es muy fuerte, te llena el corazón y eso hace que uno siga para adelante. Y este año nos abocamos más al conurbano, de donde somos y crecimos".
¿Qué pueden adelantar sobre el próximo disco?
Strunz: Estamos terminando los temas que faltan y seguramente en el verano lo vamos a grabar. Se viene con toda la polenta para abril o mayo. Estamos haciendo cosas con Javi y algunas otras dando vuelta que por ahí se dan (risas). Ojalá porque son sueños. Tenemos mucho trabajo por delante como el cierre de Cosquín Rock.